Este taller es una compilación de diferentes manuales y libros sobre como interactuar con las ciclos naturales, a que me refiero con ciclos naturales?... pues a todo lo que fluye, cambia y se transforma tanto alrededor como en nuestro interior, porque las mujeres somos como la luna y las estaciones, somos cíclicas. Todo ser viviente en la naturaleza cumple un ciclo de vida, pero también tiene ciertos momentos de su existencia, propicios para realizar tal actividad, por el momento del año o el mes que está transitando.
Nuestros deseos y necesidades no son las mismas de cuando éramos niñas, a adolescentes, a adultas y en la vejez. También varian según el momento del mes (ejemplo, cuando ovulamos tendemos a ser más sociables y cariñosas, debido a la necesidad biológica del apareamiento; todo lo contrario a cuando estamos con el período menstrual) y del año (por lo general en el verano buscamos la compañía de las amistades y en invierno de la familia y el hogar). Esto es cumplir con ciclos, siendo el último ejemplo influencia directa de la naturaleza. Y como influjos naturales, no podemos dejar por fuera las fases lunares. Está comprobado que la luna controla el flujo de los océanos y mares, y siendo el ser humano un 60 % agua, es de esperar que los cambios lunares también nos afecten. Especialmente a las mujeres, puesto que somos más sensitivas y perceptibles a los cambios en nuestro entorno.
Armonizar con los ciclos naturales es estar en conocimiento de la muerte y renacimiento que nos rodea mes a mes, año a año, y sacar partido de ello. Nuestras ancestras (porque todas tenemos en nuestro linaje ascendencia de alguna hechicera, maga, curandera o chamana), tan sabias y poderosas, sabían interactuar con estos ciclos, y lo hacían no cambiándolos sino acoplándose a ellos. Ser una con la naturaleza, con los astros, con los árboles y el mar, con el invierno y el verano… sintonizarnos con ella y fluír a la par, de manera que no nos afecte y hasta podamos salir beneficiosas de esa conexión.
Espero, compartiendo estos conocimientos, pueda resurgir tu bruja interior, y encuentres en ello un cambio de vida, disfrutando de forma plena cada expresión de la madre Tierra, sintiendo que estar recostada bajo un árbol, en la playa al sol, o caminando bajo la lluvia, es una bendición.
